La eficiencia es uno de esos conceptos que, de tan utilizados, ha acabado perdiendo para muchos su significado original. Está claro que toda empresa aspira a alcanzar la máxima eficiencia, ¿pero de qué estamos hablando exactamente?

Lo habitual es que, cuando se hace referencia al concepto de eficiencia, suela tratarse de un solo tipo de eficiencia, la económica. En este caso, hablaríamos de un uso adecuado de los diferentes factores de una empresa solo desde el punto de vista de los costes. Por tanto, el procedimiento a seguir en una compañía, mirando solo a la eficiencia económica, sería el que cueste menos. Sin embargo, hoy nos vamos a centrar en otro tipo de eficiencia, la técnica. Tenerla en cuenta puede ser clave para el desarrollo de tu empresa…

¿Qué es la eficiencia técnica? Descubre las claves para tu negocio

Eficiencia técnica: definición

¿Qué es la eficiencia técnica? Con este término, hablamos de cómo utiliza una organización de un modo técnico sus factores de producción. Siguiendo la forma en que hemos definido antes la eficiencia económica, en consecuencia el proceso más eficiente técnicamente para una empresa es el que emplee menos unidades físicas de factores productivos.

Por ello, si para obtener la misma cantidad de producto utilizamos unas combinaciones de factores productivos que nos exigen mayores sumas de esos factores, entonces estaremos yendo en contra del criterio de eficiencia técnica. Si no te ha quedado del todo claro, no te preocupes. Vamos a poner ejemplos prácticos de cómo lograr la máxima eficiencia técnica en una empresa.

¿Cómo medir la eficiencia técnica en una empresa?

Por ejemplo, imaginemos dos empresas que utilizan la misma tecnología y cuentan con el mismo número de trabajadores para producir lápices. Sin embargo, una de ellas termina un 25% más de lápices cada semana. En ese caso, podemos decir que esa compañía cuenta con un nivel mayor de eficiencia técnica. La clave está en que está aprovechando sus recursos al máximo.

Una forma de medir la eficiencia técnica de una empresa es la Productividad Parcial. En este caso, se analiza la capacidad de producción de una compañía en función de un solo factor. En consecuencia, la eficiencia será mayor si se produce más artículos o productos con menos recursos de ese factor.

Otra forma de alcanzar la máxima eficiencia técnica es medir la Productividad Total de los Factores. Ésta es más realista, porque se tienen en cuenta dos o más de los elementos empleados en el proceso de producción. Por eso, se trata de realizar una suma del grado de productividad de cada uno (número de trabajadores, tipo de maquinaria…) para averiguar si el procedimiento que estamos empleando en nuestra compañía es eficiente o no.

¿Qué es la eficiencia técnica? Descubre las claves para tu negocio

Soluciones para mejorar la eficiencia técnica en tu empresa

Por tanto, mejorar la eficiencia técnica de nuestra empresa pasa por analizar qué podemos hacer para mejorar nuestro proceso de trabajo. En este sentido, contar con un sistema de gestión puede ser la clave que nos indique qué es lo que no estamos haciendo del todo bien.

Por ejemplo, en el caso de las compañías que realizan servicios de mantenimiento, tienen esa labor un poco más fácil con Téknica. Se trata de una solución que mejora la productividad de todos los trabajadores de estas empresas. ¿Por qué? Porque les facilita su día a día, Por ejemplo, al coordinador le permite llevar un completo control de gastos y costes. Al técnico, le ayuda a ahorrar tiempo al trabajar directamente sobre una app con fotos y archivos sin tener que recurrir al papel. Y al gerente, le ofrece un cuadro de mandos específico para analizar al detalle lo que sucede en la empresa.

Además, su base es el software Primavera ERP, un sistema modular que cubre con creces las necesidades de cualquier empresa. En el marco de la eficiencia técnica, precisamente ofrece herramientas de decisión, rápidas y eficaces y un gran potencial de exploración de la información. Todo, con el propósito de que conozcas mejor tu empresa y podáis alcanzar la máxima eficiencia técnica.